TIEMPO DE PATATAS

“Me siembres en marzo, me siembres en abril, hasta mayo no he de salir”. Esto es lo que le dicen las patatas al labrador cuando las va a sembrar. Ahora es tiempo de patatas.

En Azuelo las zonas de regadío van desapareciendo quedándose llecas o en el mejor de los casos sembradas de cereal. Los pocos habitantes que quedan en el pueblo cultivan pequeñas huertas para su autoabastecimiento, huertas que se ven ampliadas un poco más gracias también a otros pocos hijos del pueblo que acuden a él los fines de semana y en vacaciones.

La huerta de Azuelo ofrece sabrosas verduras y hortalizas, pero el mejor producto de Azuelo es la patata; no sabemos si serán los componentes de la tierra o su clima de media montaña, pero lo que sí sabemos es que la patata de nuestro pueblo es muy apreciada por propios y extraños. Por algo será

Con la excusa de la siembra de la patata algunos de los hijos del pueblo, cada vez menos, se acercan a él y cultivan las pequeñas huertas de sus padres y abuelos por no dejarlas abandonadas y utilizan algunos de sus aperos, aunque los tiempos han cambiado mucho. Ahora no hay ganado de tiro, ni caballos, ni machos, ni bueyes; su falta se suple como se puede, así podemos ver al abuelo Javier haciendo de macho y tirando del marcador o al abuelo Ignacio guiando su mula mecánica y es que… Azuelo se ha convertido en un pueblo de abuelos, su población es muy escasa y muy envejecida. ¿Qué será de nuestro pueblo cuando falten los abuelos? Ellos regarán las patatas en verano y las recogerán en el otoño. Y tú, ¿cuándo vas a venir?