HISTORIA ILUSTRADA DE LA ESCUELA EN NAVARRA (1828-1970)

El 24 de mayo de 2019, se presentó el libro “Historia ilustrada de la escuela en Navarra (1828-1970)”, editado por el Gobierno de Navarra, obra de Guillermo Iriarte Aranaz, Maestro de Enseñanza Primaria, Profesor de EGB y que terminó su vida docente como Orientador Escolar.

En este libro se hace una extensa mención fotográfica y literaria de la escuela de Azuelo. Nuestra felicitación a Guillermo por tan interesante e intenso trabajo y nuestro agradecimiento por incluir en él la escuela de nuestro pueblo. ¡Gracias, Guillermo!

Este libro-museo-documento es una contribución al estudio de la escuela de Navarra y de sus maestros y maestras desde la celebración de las Cortes de 1828-1829 hasta la Ley General de Educación aprobada el año 1970. Entre otras cuestiones ilustra en profundidad el patrimonio material, los edificios escolares, la estufa, los pupitres, la confección de la tinta, la pizarra y el pizarrín, los mapas… aulas de 70 alumnos con material escaso y métodos de aprendizaje basados en la repetición, el canto y la ayuda de los alumnos mayores a las secciones de los más pequeños.

La mención que se hace a la escuela de Azuelo aparece en las páginas 309, 310 y 412. En la página 309 aparecen cinco fotografías y estos textos: ”A mediados del siglo XIX, Azuelo (Tierra Estella) disponía de una Escuela de Primeras Letras frecuentada por 35 niños de ambos sexos, cuyo maestro percibía una retribución anual de 80 robos de trigo. Durante el primer tercio del siglo XX, el Ayuntamiento habilitó la escuela en un edificio de tres plantas, donde también estaban instalados el ayuntamiento, la herrería y el calabozo municipal. La fotografía de la izquierda se corresponde con la primera Escuela, la del centro es la imagen, en porcelana, del Corazón de Jesús que estaba arriba de la puerta de entrada y la tercera fotografía se corresponde con el primer edificio, pero restaurado. En la actualidad funciona como casa de cultura, salón-bar social, ludoteca, biblioteca y centro de informática. Las fotografías corresponden a la Colección de la “Asociación Santa Engracia” de Azuelo”.

“Las condiciones higiénicas de la escuela de Azuelo eran deplorables. El escritor Pablo Antoñana comentó en su día que era “una Escuela cuyos muros estaban costrosos y sus interiores en pésimas condiciones”. Por todo ello, el Ayuntamiento, siendo alcalde Jaime Díaz de Cerio Ruiz, decidió construir una nueva escuela en 1959, acogiéndose al Plan Nacional de Construcciones Escolares, como reza aún en la placa que se puede ver sobre la entrada del edificio, que desde 2003 es el nuevo Ayuntamiento del pueblo. La nueva Escuela se inauguró el 2 de noviembre de 1960. Las obras fueron presupuestadas en 348.145 pts. y al finalizar la construcción el importe de las obras sobrepasó las 400.000 pts. La maestra titular de Azuelo era doña Francisca Ruiz Díaz de Cerio. En 1.976 se suprimió la Escuela, los 20 alumnos de la Escuela y su maestra, doña Bienvenida Lacalle Zúñiga, se integraron en el Colegio Comarcal Santa María de Los Arcos. Fotografía correspondiente al interior del aula de Azuelo. 1940”

La quinta fotografía de esta página tiene un pie de foto que dice: “Escuela Nacional de Azuelo, construida en 1959. Fotografía cedida por la Colección de la Asociación “Santa Engracia” de Azuelo. 2015”.

En la página 310 aparecen dos fotografías, la primera con un pie de foto que dice: “Doña Francisca Ruiz Díaz de Cerio con sus alumnos de Azuelo en 1960” y en la segunda: “Doña Bienvenida Lacalle Zúñiga con sus alumnos de Azuelo en 1976”. Fotografías cedidas por la Asociación Santa Engracia

En la página 412 aparece una fotografía de una orla muy artística escrita por el  maestro de Azuelo, Francisco Javier Soto cuyo texto dice así:
“M.Y.S.
Francisco Javier Soto natural de la Ciudad de Viana y maestro de primera educación residente en la Villa de Azuelo, con el devido respeto espone ha llegado a su noticia que el magisterio de esa Villa se halla vacante, y hallándose el suplicante adornado de las prendas necesarias para tal maestro, y bien impuesto en los ramos de leer, escribir, contar, ortografía, gramática castellana, doctrina cristiana, reglas de urbanidad, y demás que constituyen al hombre social, político cristiano: en todo lo cual promete instruir a sus discípulos a entera satisfacción del público, y para realizar sus deseos
    A.V.S. suplica tenga la bondad de nombrarlo por su maestro; pues en ello recibirá singular merced
Azuelo 18 de 1819        Francisco Javier Soto”

El pie de esta fotografía dice: “En 1819, el maestro de primeras letras, don Francisco Javier Soto, presentó instancias en aquellas localidades donde los ayuntamientos solicitaban maestros. Documento cedido por Javier Beunza”.

En Azuelo queda documentada la existencia de Maestro de Niños desde los primeros años del siglo XVII, y esto, como cosa no reciente, sino que venía de tiempo atrás. En 1617 era maestro en Azuelo Diego Martinez natural de Dicastillo. Entonces el maestro estaba obligado a enseñar a leer, escribir, contar, enseñar la doctrina cristiana y a cantar. La escuela no era todavía obligatoria, sino que dependía de la voluntad de los padres. El maestro era también sacristán.

Sueldo del maestro sacristán. Los padres de los niños le daban 48 robos de trigo. El Concejo le aportaba 12 robos de trigo y el Monasterio le añadía 12 robos de trigo y una oblada de las ofrendas de cada día, y “dos obladas en cada domingo y día de los doce Apóstoles y Nuestra Señora, y tres obladas los primeros días de Pascua, en todas las Pascuas”.
El Concejo le añadía estas ventajas “se le permitía traer un lechón al aprovechamiento del monte y, demás de ello, pueda aprovechar de la leña menuda del monte y, si se repartiese, se dé también”
Así que, el sueldo del maestro-sacristán salía, además de las ventajas señaladas por 72 robos de trigo al año.