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CENTENARIO DEL SINDICATO DE ESPRONCEDA
”Es el corazón del pueblo
y se llama Sindicato
es el corazón del pueblo
celebra su centenario
lo fundaron los abuelos
lo fundaron los abuelos
es el corazón del pueblo”.
El día 18 de junio el Sindicato de Espronceda conmemoró su centenario. Era el mes de junio de 1916 cuando al pueblo de Espronceda llegaban los primeros aires de lo que era un sindicato. Al rebufo de los sindicatos de clase de las zonas industriales llegan a la zona rural los sindicatos agrícolas promovidos por los párrocos.
Nuestro pueblo, Azuelo, también es partícipe de este centenario, ya que fueron treinta y cuatro los labradores de Azuelo que se asociaron a este Sindicato desde su fundación y pertenecieron a él hasta que se segregaron para formar su propio Sindicato
Nace el Sindicato Agrícola Católico de Espronceda el 16 de junio de 1916 con su acta fundacional, siendo su primer presidente D. Onofre Díaz de Cerio. Constituida la Junta Directiva, forma parte de ella y con suma importancia e influencia el Consiliario, que es el párroco de la localidad, D. Agapito Martinez.
A lo largo de estos cien años el discurrir histórico y los avatares políticos le han hecho evolucionar y transformarse. Así vemos como en 1940 por orden ministerial pasa a denominarse Caja Rural Católica de Espronceda. En 1944, Cooperativa Agrícola Caja Rural Católica de Espronceda. En 1946, Cooperativa del Campo, denominación que se mantiene hasta 1965 cuando para a ser, Centro Recreativo de Espronceda, función que es la que actualmente tiene, aunque En Espronceda, a pesar de los cambios oficiales de denominación, siempre se le ha conocido y se le conoce por EL SINDICATO.
En tan notable y entrañable efeméride la Junta Directiva actual programó unos sencillos actos llenos de emotividad para los de Espronceda. Tras la misa a las trece horas con la que se evocaba aquella primitiva coletilla de Católico, el Párroco, José Ignacio Hernández, la Junta Directiva, los vecinos de Espronceda y algunos de Azuelo se dirigieron a la Plaza de los Fueros, donde el Sindicato tiene su domicilio social y el Presidente, Antonio Fernández, acompañado por el Secretario Fernando Rodriguez y uno de los vocales, Miguel Irisarri, descubrió una sencilla placa con la leyenda: “Centenario del Sindicato de Espronceda, 16-6-1916----16-6-2016”. Terminó el acto oficial con los acordes de una jota dedicada a los fundadores del Sindicato e interpretada por los componentes del grupo parroquial, que es la que introduce esta noticia.
Prosiguieron los actos con un aperitivo en la Plaza para todos los asistentes ofrecido por el Sindicato y a continuación los de Espronceda se dispersaron por calles y bajeras para preparar sus calderetes y paellas por cuadrillas. Una vez cocinadas las comidas se reunieron de nuevo en el domicilio social del Sindicato para comer conjuntamente en una comida de hermandad terminando con una alegre sobremesa amenizada por la Orquesta Los Pistachos de Pamplona.
Como se puede leer en el primer sello del Sindicato su lema fue:”Unos por otros y Dios por todos”. Tiene por objetivos el Sindicato defender los intereses de los agricultores, sobre todo los económicos. Hasta 1930 formó parte de la Federación de Sindicatos Agrícolas Católicos de Logroño, dada su proximidad a la capital riojana. En 1930 se separó de la Federación de Logroño y se integra en la de Pamplona.
Los socios del sindicato se benefician en la compra de los abonos que se hacen conjuntamente con todos los sindicatos de la Federación. Hacen compras conjuntas, para abaratar precios, de todos los útiles y herramientas necesarios para las labores agrícolas. Dispone el sindicato de dos tiendas cooperativas, una en Azuelo regentada por Casto Crespo y otra en Espronceda regentada por Fidel Larumbe.
En las tiendas se vendía aceite, anisado, jabón blanco, jabón azul, arroz, garbanzos, bacalao, azúcar, café, latas de pimiento y tomate, pimiento molido, galletas, bizcochos, sacos de pulpa de remolacha, escobas, capazos, alforjas, sogas, espartos, hoces, azadas, hachas…
Se dotó el sindicato con maquinaria que utilizaban todos los socios turnándose, seleccionadora de grano, prensa de vino, molino triturador de grano y en 1952 una gran y moderna trilladora. En la compra de esta trilladora tuvo un papel importante un labrador de Azuelo, Luis Crespo, que fue uno de los mayores prestamistas del Sindicato para poder hacer la compra. Más lo que manifiesta la fuerza de este sindicato fue la creación en 1917 de una Caja de Ahorros. Así fue como tras una conferencia agrícola-social en Espronceda ofrecida por D. Angel Polo y Fernández, Capitán de Intendencia de Madrid que anima a establecer dentro del Sindicato una Caja de Ahorros y Préstamos para lo cual regaló una libreta con 10 pts. al socio Juan Rodriguez, pastor de Espronceda, tiene su origen la “CAJA DE AHORROS Y PRESTAMOS DEL SINDICATO DE ESPRONCEDA” según el Reglamento aprobado por R.O. del Ministerio de Hacienda de 28 de agosto de 1917, siendo presidente del Consejo Directivo, D. Anastasio Pérez de Pipaón.
A lo largo de su historia el Sindicato ha tenido momentos altos y bajos, quizás el más alto fue cuando adquirió para su sede el palacio cabo de armería de la familia Modet, que lo vendió juntamente con toda su hacienda de Espronceda. El Sindicato, pocos años después vendió el palacio al Ayuntamiento de Espronceda para abonar deudas y capitalizarse.
Son cien años de historia de un pueblo; de un pueblo que hoy recuerda y evoca la vida laboral y social de sus antepasados en un legado del cual hoy aún disfruta y que ha iniciado con ilusión su segundo centenario.