Noticias
ASCENSION ARISTIMUÑO ACEDO
El día 28 de abril de 2023 falleció en Madrid la azueluca ASCENSION ARISTIMUÑO ACEDO, a los 99 años de edad.
Ascensión era hija de Julio (conocido en Azuelo como Julito El Carpintero) y Severiana. Este matrimonio tuvo dos hijos, Aurelio “El último trovero de Tierra Estella” y Ascensión.
Aurelio y Ascensión quedaron huérfanos de madre cuando Ascensión era muy joven y su tía Eustolia, hermana de su madre, que no tenía hijos, y vivía en Madrid, se la llevó con ella. Así fue como la risueña jovencita partió de Azuelo para afincarse en la capital de España. La gran ciudad transformó a la jovencita azueluca en una alegre y jovial señorita de amplia sonrisa y acento madrileño, que alternando por los madriles ennovió con un apuesto madrileño, Luis Cabezas, fallecido. Eso sí, bajo la tutela de su tía Eustolia y su marido Enrique que era inspector de policía. Ascensión y Luis se desposaron y en la boda llevó las arras Luci, hija de Eugenio y Flora, una niña a la que su tía Eustolia quería tener para ocupar el hueco que dejaba Ascensión. El matrimonio de Ascensión y Luis tuvo dos hijos, Román y Luisa Mari.
Ascensión venía todos los veranos a pasar las vacaciones con sus tíos en Azuelo. Aquí disfrutaba y alternaba con sus amigas de la infancia moceando. Cuando se casó venía con su marido y sus hijos. Román, Monchi se le llamaba en Azuelo, se hizo famoso en el pueblo porque desde que llegaba hasta que volvía a Madrid siempre iba con un palo en la mano. Parece ser que los niños madrileños no estaban acostumbrados a jugar con palos. El año 2019 Ascensión, a sus 95 años, vino por última vez a Azuelo. Dijo que venía a despedirse de su pueblo.
Ascensión nació en Azuelo, era de Azuelo y su deseo era que cuando falleciese sus restos descansasen en su Azuelo natal, como así lo han hecho posible sus hijos. El amor por su pueblo fue muy grande, hasta su fallecimiento ha sido socia de la Asociación C.R. Santa Engracia y de la Asociación C. Monasterio San Jorge de Azuelo, al igual que lo son sus hijos. El año 2004 tras un intento de robo en la iglesia del Monasterio forzando la puerta de entrada se colgó en nuestra página esta noticia. Ascensión y sus hijos quisieron colaborar con los trabajos voluntarios y altruistas que los socios y socias de Santa Engracia estaban esos años haciendo para revitalizar el pueblo y dotaron a sus expensas la alarma que está instalada actualmente en el Monasterio.
Con Ascensión desaparecen cien años de la vida de Azuelo, un pueblo que por más que se empeña en sobrevivir ve como sus habitantes son menos y más envejecidos, la agricultura y la ganadería son testimoniales, sólo queda un agricultor y el rebaño de ovejas que pasta por sus campos es de Torralba. Se está convirtiendo en un pueblo de jubilados.
La Asociación Santa Engracia y todos sus socios envían desde esta página sus condolencias a los hijos de Ascensión, Román e Isabel, Luisa Mari y Francisco, nietos y biznietos Luis, Cristina, María, Patricia, Adrián, Víctor y demás familiares por esta sentida pérdida de una “azueluca de pro” y les acompañan en estos duros días por los que están pasando, para todos ellos un abrazo.