VII JORNADA TURÍSTICO CULTURAL ZONA DE LOS ARCOS

29 Mayo, 2013

El 25 de mayo de 2013 tuvo lugar en Aguilar de Codés la “VII Jornada Turístico Cultural de la Zona de Los Arcos”. Siete ediciones de este proyecto que emula la “Fiesta del Valle” de otras zonas de Navarra. La Zona de Los Arcos se desborda por los laterales del Valle de Aguilar llegando a Bargota por la ribera derecha y a Mues y Los Arcos por la izquierda e inunda las llanuras de Torres y El Busto. Siete ediciones que tienen por objetivo que las gentes de los pueblos de la Zona se conozcan y a la vez estas gentes conozcan los pueblos con todos los recursos turísticos y culturales que ofrecen.

Los aventones, gentilicio de los de Aguilar por el viento abundante en su pueblo, se han esmerado este año en preparar el programa del día para “vender” su pueblo a todos los participantes en esta jornada.

Decir Aguilar, es decir salinas, y decir salinas es decir Callejas. Luis Callejas, salinero desde joven cercano a los ochenta años, es una institución en salinas, aún elabora sal en unas pocas eras que tiene operativas en la zona del monte. Hasta tres salinas llegó a tener Aguilar.

Una de estas salinas, las Salinas de San José, están mucho más cerca de Azuelo que de Aguilar, tan cerca que los de Azuelo las consideramos nuestras porque de Azuelo fue su dueña, María Vizcainaga, cuando le puso este nombre a sus salinas. Le puso el nombre de su santo preferido, San José. Esta mujer era tan devota de San José que en su casa de Azuelo le dedicó una gran capilla donde se decía la misa los domingos durante el invierno. El término donde están ubicadas estas salinas se halla ocupado por piezas que son todas de Azuelo. Queremos tanto a estas salinas que hasta las ponemos todas las navidades en el Belén Monumental que instalamos en el Monasterio. Que no se enfaden los de Aguilar por apropiarnos de “nuestras salinas”, que ellos sí que se han apropiado de nuestra Peña. Y lo bien que les ha quedado nuestra Peña en ese libro que han regalado a los Ayuntamientos como recuerdo de la Jornada. Así que aceptamos el trueque de salinas por Peña.

Aguilar, pueblo de origen medieval, se ambientó para este día en la época medieval. El mercado, donde se vendían los productos típicos de la zona como el chorizo y el aceite y las labores de artesanos. Reyes, reinas, titiriteros, músicos, damas, caballeros, soldados, labriegos… se paseaban por sus calles; hasta vimos al mismísimo Aguila Roja vigilando los “ganchos de Aguilar” para que no los robasen; los ganchos, al igual que las salinas, son otro de los emblemas de Aguilar. También asistimos a las clases de tiro con arco impartidas por Robin Hood, aunque a los de Azuelo no nos hace falta aprender mucho de esta especialidad cinegética que nuestro Luis Sanguino este año se ha proclamado subcampeón de Europa en Castellón.

Tres burros se pasearon por las calles del pueblo recordando tiempos pasados de Aguilar, pueblo en el que se hacían las labores agrícolas con caballos y mulos en vez de bueyes como se hacían en Azuelo.

Queramos o no queramos, nos guste o no nos guste, el pueblo más bonito de toda la zona es Aguilar. Esa Calle Mayor, que en su día seguro que se llamaba Camino Real, con sus casas blasonadas y sus balcones llenos de macetas no la tenemos en ninguno de nuestros pueblos. Una calle que acoge un frontón peculiar, el frontón más antiguo cubierto y cerrado de todo Navarra.

El esfuerzo que realizaron los de Aguilar por mostrarnos y “vendernos” su pueblo, como ya viene siendo tradicional en la celebración de este evento desde el primer año en los otros pueblos donde se ha celebrado, no fue visto y por lo tanto no reconocido por los habitantes del resto de los pueblos, dado el número tan bajo de asistentes de cada uno de ellos; aunque echando la vista atrás, el año pasado de Aguilar asistieron a Torrres 2, el anterior a El Busto 3, el anterior a Desojo 4 … Esta reflexión la hacemos todos los años. Consideramos que la asistencia es baja, tan baja que la de algunos pueblos es testimonial.

Venimos anunciando año tras año que esta actividad si no se reconduce  se quedará como una actividad local a la que asistirán solamente los del pueblo donde se celebre y los alcaldes del resto de los pueblos. Cada año se reduce el número de asistentes, este año han sido 264, veinte menos que el año pasado. Aguilar aportó 105 asistentes, como pueblo organizador; el resto de los asistentes fueron, Armañanzas (7), Azuelo (10), Bargota (4), Desojo (39), El Busto (4), Espronceda (23), Los Arcos (40), Mues (2), Sansol (11), Torralba (8) y Torres (11). Esperamos que el próximo año en Sansol se supere con creces esta cantidad de asistentes.

Visto lo visto, entendemos que esta actividad, tras siete años de celebrarse dista mucho de conseguir el objetivo para el que fue creada “que nuestros pueblos se conozcan más y mejor, además de compartir servicios mancomunados, ya que hoy en día las distancias son mínimas y se necesita un mayor contacto entre los habitantes de estos pueblos pequeños, que cada día son menos.” (Jerónimo Gómez, Presidente de la Mancomunidad)