MERCADO DE LA BRUJERÍA EN BARGOTA
Johanes, el Cura de Bargota volvió un año más a su pueblo e hizo uno de sus famosos “milagros” transformando todo el pueblo y llevándolo a través del túnel del tiempo en su nube voladora lo aparcó en el s.XVI.
Durante una semana, desde el 17 al 24 de julio, Bargota honró a su personaje más ilustre, Johanes. Un maridaje de historia y leyenda convierten a este cura en todo un personaje que por si sólo es capaz de movilizar a miles de personas para pasar por su casa viéndolo dormir en su cama con la cabeza sobre la mesilla, donde la dejaba toda las noches al acostarse.
El Cura de Bargota o El Brujo de Bargota, que por ambos nombres se le conoce a Johanes, no sólo es un personaje de Bargota, sino que lo es también de todos los pueblos de los alrededores, incluido el nuestro con el que muga Bargota y tenemos en común un término. “Garañango”. Garañango es también el grupo de teatro de Bargota que todos los años representa la vida y andanzas de El Brujo antes de asistir al aquelarre.
El día álgido de esta Semana de la Brujería fue el domingo, día 19, cuando se celebró el Mercado de la Brujería. Un mercado que supera a todos los “mercados” que abundan y se repiten en muchísimas localidades ya sean mercados medievales, romanos, barrocos…
El Mercado de la Brujería instalado en las calles del pueblo recreadas todas en la época que vivió El Brujo, además de recoger todo tipo de puestos de ventas artesanas, se abren al público más de veinte bajeras de las casas particulares recreando en cada una de ellas aspectos distintos de la vida cotidiana y social de los tiempos de Johanes, predominando las relacionadas con la brujería, que sorprenden a quienes las visitan.
Nuestra Asociación colabora dese el año 2010 con la comisión organizadora de la Semana de la Brujería recreando una de las bajeras con el tema de “La Matanza del Cocho”. Desde Azuelo durante unos días se llevan a Bargota todos los utensilios y enseres que van a dar vida a la bajera montando lo esencial de una casa para realizar la matanza: el banco donde se sacrifica el cocho con el gancho, el cuchillo y el barrañón para recoger la sangre, los “escobiles” para chuscarrarlo, la gran romana para pesarlo y la escalera para colgarlo para que se oree. La pocilga con el cocho en la cuadra con las gallinas y el gallo, la amasandería donde se hace el pan para luego con él hacer morcillas, la cocina completa de fogón con todo su menaje y la caldera para cocer las morcillas, la máquina de picar la carne y hacer los chorizos, la morcillera y varias herramientas y aperos agrícolas antiguas.
El día del Mercado la bajera estuvo atendida por un grupo de socios y socias que se encargaron de explicar a los visitantes su contenido y a las 13´00 h. ofrecieron una degustación de picadillo que como todos los años es muy bien aceptada formándose grandes colas en la puerta para recoger la ración de picadillo con un poco de pan y un vaso de vino de Bargota.
Esta colaboración de la Asociación con los de Bargota durante estos años ha servido para que bargotanos y azuelucos tengan una estrecha relación de amistad que anteriormente no existía a pesar de que son dos pueblos cercanos y vecinos, ya que la jurisdicción norte de Bargota muga con la sur de Azuelo.
Los de Azuelo agradecemos el cariño y la confianza con que nos acogen los de Bargota y les decimos que si el próximo año nos invitan a participar, allí estaremos, y a quienes aún no hayan asistido a los actos de la Semana de la Brujería les recomendamos que no se la pierdan el próximo año y para que vayan haciendo boca pueden ir viendo el reportaje fotográfico.