IX MARCHA “RUTA DE LOS LAVADEROS”

27 Junio, 2016

Un año más, y ya van nueve, las asociaciones Katxupin de Espronceda, Nuestra Sra. de Collantes de Aguilar de Codés, Peñablanca de Torralba del Río, Grupo de Senderismos de Bargota y Santa Engracia de Azuelo organizaron la IX Marcha Ruta de los Lavaderos que tuvo lugar el día 11 de junio.

Esta marcha de senderismo tiene por objetivos promocionar y dar a conocer el patrimonio menor de los pueblos por los que discurre como son lavaderos, fuentes, ermitas, aljibes...restaurados durante los últimos años en unos casos con la colaboración de los vecinos y en otros con la Agencia Teder, disfrutar de los campos y paisajes para muchos de los participantes inéditos y desconocidos, y por último, lo que es más importante, convivir durante toda la jornada con personas de los distintos pueblos y todos los forasteros que a la jornada acuden.

.A las nueve de la mañana ochenta y dos senderistas con un tiempo y temperatura ideales para caminar, pertrechados par afrontar la marcha partían desde el Lavadero de la Fuente de Azuelo y tras pasar por el Lavadero de La Calzada del Monasterio se dirigieron hacia Bargota. Pronto dejaron atrás el Monasterio de San Jorge de Azuelo e iniciaron la subida al parque eólico Las Llanas de Codés, echaron un trago de agua en la monumental Fuente de Las Pilas, restaurada el año 2002 por La Asociación Santa Engracia. Desde lo alto del parque eólico divisaron los Valles del Ebro y de Aguilar. Continuaron por una larga bajada hasta llegar a Bargota.

En Bargota almorzaron en el frontón cubierto. Un almuerzo de cuchillo y tenedor, huevos fritos con panceta y chistorra regados con vino de Bargota. Tras reponer fuerzas, reanudaron de nuevo la marcha en dirección a Espronceda; fueron varios los senderistas que se agregaron a la marcha al salir de Bargota, ya que la marcha está concebida para que cada uno de los participantes ande los kilómetros que quiera y los tramos del itinerario que cada uno quiera andar. A la salida de Bargota se detuvieron para visitar y admirar el monumental Lavadero de Bargota que con un cuidado entorno y unos árboles, cada año más grandes forman un conjunto muy plástico para la vista y las fotografías y ornamental para el pueblo.

Ascendiendo por el valle de la fuente de Las Espilas llegaron a Espronceda los senderistas, noventa y siete, donde pararon a visitar el lavadero, que como en años anteriores, estaba sin agua y un poco descuidado. Este lavadero fue el primero que se restauró de la zona y lleno de agua es muy hermoso, a ver si el próximo año se puede ver lleno de agua, porque en su día tenía hasta carpas. Tras avituallarse de fruta y agua y visitar el Crucero que hay en esta localidad, uno de los más importantes de Navarra, los senderistas  continuaron por el itinerario previsto rumbo a Codés y llegaron a Torralba del Río, donde ya es tradicional que su Alcalde, Jesús Cayetano, salga a recibirlos en el Lavadero de la Fuente de Torralba ofreciéndoles refrescos. Tras descansar y refrescarse en Torralba los senderistas acometieron el último tramo del itinerario para llegar a Azuelo. A la salida de Torralba pudieron ver el Lavadero de La Lusa; Torralba, como Azuelo, tiene dos lavaderos. Pasando por la ermita de San Simeón de Cabredo, cuya romería conjunta de Azuelo y Cabredo será el próximo domingo, día 19 de junio y el Monasterio de Azuelo, llegaron al final de trayecto..

Eran las dos de la tarde cuando con la llegada de los senderistas a Azuelo se daba por terminada la marcha circular que habían emprendido a las nueve de la mañanan. Los senderistas tras cambiarse de ropa y asearse un poco en los lavaderos se dirigieron al Granero donde iba a tener lugar la comida. Fue entonces cuando se vieron sorprendidos con la actuación de la Batukada Goraño de Bargota, formada por jóvenes y mayores de esta localidad que con sus sones rítmicos amenizaron la espera de la comida dando un pasacalles por el pueblo acompañados por los senderistas que aún tenían fuerzas para marcarse unos pasos al ritmo de la Batukada.

A las tres de la tarde, senderistas y músicos de la Batukada, entre todos pasaron con creces del centenar, dieron buena cuenta de dos hermosas paellas mixtas de pollo, conejo y marisco precedidas de entrante y ensalada fría y continuada con melón, helado, café y licores. La comida fue preparada por varias socias de la Asociación Santa Engracia

Tras la comida, una descansada y prolongada sobremesa amenizada otra vez por las canciones rítmicas de la Batukada puso fin a la jornada que une pueblos acortando distancias entre sus gentes relacionadas por medios de vida de antaño que tenían en común la vida social que se hacía entonces en los lavaderos y en los anexos pilones o abrevaderos para el ganado. Una jornada de convivencia que en todos los asistentes dejó un grato recuerdo y en la despedida, como ya es habitual todos los años, la frase que más se oyó fue ¡Hasta el año que viene! ¡No! ¡Que antes nos veremos en Bargota en “La Brujería” en julio!