EZEQUIEL

   El dia 10 de julio fallecio Ezequiel Crespo Aristimuno a los 90 anos en San Sebastian.

   Ezequiel fue aquel chico de Azuelo que se ofrecio voluntario para ir a la mili y hasta participo en la Guerra Civil para con este gesto sustituir a uno de sus hermanos mayores que se quedo en el pueblo para llevar la "hacienda". Cuando regreso del servicio militar, aquel mozo avispado se busco la vida y con una bicicleta se dedico a llevar tabaco a San Sebastian dedicandose al estraperlo, que en ese tiempo habia mucho y era muy arriesgado. Una vez en San Sebastian se hizo conductor de trolebus y se inicio en la electricidad.

   Ezequiel fue electricista hasta que fallecio, lo llevavaba en la sangre, en el aprendizaje de este oficio fue un autodidacta puro, monto su taller y les enseno el oficio a sus hijos, Javier y Miguel Angel. Era un electricista por vocacion y dedicacion; aun recordamos cuando en la epoca que unas instalaciones estaban a 125 y otras a 220 para saber a cual de las dos correspondia alli donde iba a trabajar metia dos dedos en el enchufe y segun la descarga electrica que recibia las clasificaba, y siempre acertaba.

   Fue un enamorado de la tecnologia y sus avances. Disfruto mucho e hizo disfrutar a su familia llevandolos en su "Seiscientos" de un lado para otro. Pero cuando mas disfruto Ezequiel, viendo que la vida se le iba poco a poco y que aun le quedaba por hacer realidad uno de sus deseos, fue hace dos anos, el dia que su hijo Miguel Angel lo trajo a Azuelo y los dos recorrieron la Sierra viendo los "molinos" instalados en todas las cogoteras produciendo electricidad . !Quien le iba a decir a aquel mocete avispado que ponia lazos para cazar perdices por la Sierra, que un dia iba a estar poblada de gigantes aerogeneradores! Fue el ultimo dia que estuvo en Azuelo y que al contarlo a quienes le escuchabamos, siempre terminaba diciendo !Que buenas estaban las chuletillas que nos comimos ese dia en el Corral de Ganuza!

   Ezequiel, un azueluco mas nos ha dejado este ano, estara siempre en nuestro recuerdo y mas cuando nos acerquemos a San Sebastian y paseemos por La Cocha, su playa, donde descansaba los veranos de su ajetreado trabajo.

   Desde aqui queremos hacer llegar nuestro mas sentido pesame a sus hijos, Miguel Angel y Amaya, a su hermano Vitorino, a sus nietos y demas familiares.